Para quienes están familiarizados con la destreza manual, la mecánica y el bricolaje, abrir una ferretería puede ser sin duda una buena idea.
Pero veamos con detalle cuánto cuesta, los requisitos que se necesitan y los beneficios que se pueden obtener de esta actividad empresarial. Sigue estos consejos de Ferreteria Industrial Online:
Cómo montar una ferretería: proceso burocrático
Como en cualquier empresa que se precie, el proceso burocrático que hay que seguir es siempre el mismo, a saber:
- Abrir un número de IVA;
- Inscripción en la Cámara de Comercio;
- Regularización del propio puesto tanto para el INPS como para el INAIL;
- Presentación de la declaración de inicio de actividad en el ayuntamiento donde se ubique el local;
- Cierre de los posibles permisos y autorizaciones ante los organismos competentes.
Además, el local debe cumplir la normativa vigente tanto en lo que se refiere a la instalación eléctrica como a la seguridad, ya que si en su interior hay disolventes, detergentes químicos o pinturas, pueden representar un grave peligro, no sólo para el propietario, sino también para los clientes que se encuentren en su interior.
Para evitar errores u olvidos, sigue siendo aconsejable consultar a un contable. Preparará toda la documentación técnica (con la ayuda de técnicos) y fiscal necesaria para poner en marcha una ferretería.
¿Qué se necesita para abrir una ferretería?
1. Conocimiento del sector
Sin duda, lo primero que necesita es conocer bien el sector, de lo contrario empezará con mal pie. De hecho, los clientes deben ser asesorados y orientados hacia la solución que mejor se adapte a sus necesidades.
2. Capital económico
Es evidente que para abrir una ferretería, así como cualquier otro negocio, es necesario disponer de capital económico para iniciar todos los trámites burocráticos y asumir los diversos costes de apertura.
El coste depende del tipo de servicio que quieras ofrecer a tus clientes, y también debes considerar un espacio que pueda utilizarse no sólo como tienda, sino también como taller y almacén.
También hay que tener en cuenta el alquiler o la compra del mismo local.
3. Elección del mobiliario y el equipamiento
El mobiliario y el equipamiento preferidos también varían en función de los productos que se vayan a comercializar. Por lo general, una ferretería dispone de una amplia gama de productos que van desde los accesorios hasta el bricolaje, pasando por productos para profesionales o para amas de casa.
4. La ubicación de los locales
Para tener éxito con el negocio, hay que prestar atención a la ubicación del local. En este sentido, para poder obtener un beneficio decente, es esencial que esté situado cerca de un centro comercial con amplio aparcamiento. Este último factor es decisivo, así que antes de decidir qué local elegir, presta atención al espacio de aparcamiento para los clientes.
El negocio no debe estar cerca de supermercados porque está claro que también ofrecen más o menos el mismo producto.
La ubicación ideal, por tanto, es en una calle concurrida pero no lejos del centro de la ciudad.
5. Estudio de mercado
Antes de elegir la ubicación, es necesario realizar un estudio de mercado para conocer mejor si existen comercios similares en las inmediaciones.
Si es así, hay dos soluciones:
Elija otro lugar que esté alejado de los competidores;
Hacerse con el local pero distinguirse de los demás intentando ofrecer a los clientes un servicio exclusivo.